ARABA SIN GAROÑA FELICITA AL PUEBLO ALAVÉS  QUE COLAPSÓ EL SÁBADO LAS CALLES DE GASTEIZ Y SE COMPROMETE A GESTIONAR ANTE GOBIERNOS Y PARTIDOS POLÍTICOS EL CIERRE DEFINITIVO DE GAROÑA

La Iniciativa Araba sin Garoña quiere felicitar a las miles de personas que colapsaron el sábado las calles de Gasteiz para pedir el cierre definitivo de la central nuclear de Garoña. La ejemplar movilización ciudadana requiere una respuesta definitiva e inmediata de instituciones y partidos políticos.

Desde Araba sin Garoña pedimos un tsunami popular que derribase el muro de imposición tras el que se parapetan los defensores de la reapertura de Garoña, y la respuesta fue espectacular, el pueblo alavés demostró su madurez y nivel de conciencia, con la manifestación más numerosa que se ha celebrado en Gasteiz por cualquier motivo en los últimos años.

Hay quien ha pretendido tapar el sol con un dedo, en un ejercicio de prestidigitación periodística que dice muy poco a favor de la objetividad y profesionalidad de algunos, banalizando el contenido, y cifrando la asistencia en “cientos”, o en la descabellada cifra de 3000 personas. La organización tuvo que parar la marcha en tres ocasiones, porque de lo contrario la cabeza se hubiese juntado con la cola de la manifestación en la Virgen Blanca, lugar de su inicio.

Según el cálculo de los organizadores, por el cruce entre las calles Olaguibel y La Paz pasaron 16.000 personas, a las que habría que sumar las que seguían bloqueadas en el punto de inicio y utilizaron las calles adyacentes. Todo ello sin olvidar la kalejira de más de 2000 personas, que los aficionados de Alavés y Real Sociedad celebraron dos horas antes tras una pancarta con el mismo lema que el de la manifestación. O la impresionante e histórica imagen de un campo de Mendizorrotza que a las 7 en punto de la tarde inundó las gradas con el logotipo de Araba sin Garoña. En total más de 20.000 personas respondieron al llamamiento de crear un “tsunami popular”.

Una manifestación convocada con un mensaje nítido y claro, a través del Manifiesto donde se pedía un compromiso real a instituciones y formaciones políticas, y que nos habilita para reunirnos tanto con el Gobierno del Reino de España, como con el resto de instituciones y agentes políticos, para gestionar desde la transparencia, como hemos hecho desde nuestra creación, la voluntad popular mayoritaria de la sociedad alavesa, que lleva demasiado tiempo sin encontrar respuesta satisfactoria a su demanda de cierre definitivo de esta vetusta, peligrosa e innecesaria central nuclear.

ARABA SIN GAROÑA